RETO 4
Cuento rimado para niños en fomento de la
igualdad de trato.
Érase una vez que quizá nunca fuera, se encontraba conviviendo
leones con panteras, diversos animales convivan sin pesar entre lagos y
montañas, ¡Una fiesta sin cesar!
En el pueblo organizaban todo tipo de actividades para
compartir y disfrutar sus diversas cualidades.
Los pájaros cantaban fuerte y era pura armonía, las jirafas llegaban
muy alto que gozo, que alegría.
Todos eran felices con sus talentos y habilidades, se
ayudaban y complementaban con las fortalezas de los otros y sus diversas
cualidades.
Un día el ayuntamiento con un terreno que sobraba quiso
realizar una carrera en competencia para que las liebres se retaran.
En esto dos liebres amigas querían apuntarse. Una animaba a
la otra a no amedrentarse.
Liebre 1-Venga lo pasaremos bien, a ti te encantan las
carreras, lo sabes, lo sé.
Liebre 2- Me encantaban las carreras no te lo voy a negar, desde
que me lastime las patas traseras, no lo he vuelto a intentar.
Liebre 1-Yo creo que deberías volver a correr si te gusta y
te hace feliz, pero entiendo tu problema y la verdad no se como contribuir…
pero podemos ir con los cuervos, ellos son sumamente inteligentes y seguro que les
ocurre como ayudarnos para poder sobrepasar este obstáculo de frente.
Liebre 2 No sé… me han contado desde pequeño que los cuervos
son malos… no creo que quieran ayudarnos, incluso podrían dañarnos.
Liebre 1¿Pero conoces a algún cuervo?
Liebre 2No tengo el placer
Liebre 1¿Y entonces como sabes lo malos que puede ser? Amigo
te sorprenderías de cuantas cosas te han contado que no te parecerán iguales al
vivirlas por tu lado. ¿No te parece aburrido vivir mirando mediante “unos ojos
prestados”?
Yo por ejemplo conozco muchos cuervos, y nunca me han decepcionado,
tengo mi propia experiencia, a mí siempre me han ayudado.
Liebre 2 Tienes razón vamos a preguntarles, no sea que por
mi falta de experiencia vaya a prejuzgarles.
Justo en ese momento y por pura casualidad aparecen sobrevolando
3 cuervos en el lugar.
Liebre 1- Ei aquí, bajad necesitamos vuestra ayuda, por
favor colaborad.
Los 3 cuervos bajaron de inmediato, las liebres le contaron y
los cuervos les ayudaron.
Le construirían un carro ligero con ruedas para desplazarse,
para que así pudiera apoyarse sobre sus patas delanteras y pudieran cumplir el
sueño de volver a correr una carrera.
Finalmente, liebre 1 y 2 se apuntaron entusiasmados a este
reto complicado que la vida les había planteado.
Los cuervos tan inteligentes y colaborativos cumplieron su
promesa y facilitaron el carro prometido.
liebre 2 Tan agradecido les dijo algo que había aprendido:
liebre 2- Oh muchas gracias por ayudarme sinceramente tengo
que disculparme, creí que erais malos, y no cumpliríais vuestra parte.
Llego el día de la carrera ambas se divirtieron, corrieron,
rieron y aunque ninguna de las dos resultó campeona de la competición, con todo
lo que habían aprendido sintieron que ellas verdaderamente, habían vencido.
Y colorín colorado este cuento se ha acabado y realmente
espero que lo hayas disfrutado. 😊
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